Por esas afortunadas cosas que muy de vez en cuando da la vida... mis vacaciones en Mar del Plata coincidieron con el primer Superclásico de 2009. Cuatro horas de cola tranquilas, sin incidentes pero igualmente agotadoras valieron la pena. Haciéndole un favor a un compañero de trabajo (también de vacaciones) compré una entrada adicional con el detalle de que es hincha (no fanático) de River y con tal de poderlo ver y ante su imposibilidad de hacer la cola del otro bando... me pidió que le sacara un ticket. Aunque no creo mucho en las cabalas y esas cosas (los que definen los partidos son los jugadores) tenía cierta sensación extraña en ser acompañado por un "infiltrado" a la tribuna descubierta que asignaron a la hinchada de Boca.
El operativo, según cuentan, fue mucho mejor que el año pasado ya que como dije no hubo incidente en la venta de entrada de ningún tipo. Pero... la organización para el ingreso... sigue siendo deficiente. Es tan complejo reunirse un día antes entre organizadores, policía y organismos de seguridad y "aclarar": estos por acá.. los otros por allá.. los de “x” por ahí.. los de “y” por allá??? es una logística muy compleja???. Esta bien, lo sé... lo sé... no les da la cabeza. El tema es que hice 3 colas... primero en un lado.. luego para el otro.. luego para allá y de regreso al segundo lugar. En fin. Siguiendo con la desorganización y aunque las plateas son "numeradas"... los números no están en las butacas... cada quien se sienta donde puede o quiere... y todo es tierra de nadie. Ah... cierto, más entradas que butacas... sobreventa? falsificación? quien sabe... la verdad... poco importa, lo concreto es el desorden y el hacinamiento de gente que paga por cierto confort y es tratada como ganado… o peor.
Sentado a la altura del área próxima a la cabecera de la hinchada de Boca... me puse a pensar algo más en el juego. Si los pibes (y no tanto) habían jugando bien contra San Lorenzo e Independiente para que Ischia ponía a los titulares "duros" por la pretemporada??. Ah.. no puedo dejar de mencionar algo: cuando se dio la formación las ovaciones fueron para Battaglia (no entendí porque no fue capitán) y para... el Virrey. Bueno, vuelvo al juego, como se banca Ayala su debut superclásico? Roncaglia tendría problemas con la velocidad de Buonanotte o Rosales?... estará bien Forlin?... Dátolo tendrá una buena o una noche de "esas"?? Mouche debe estar agotado (3 partidos en una semana de pretemporada es mucho... ojala no se lesione, pensé), Viatri repetirá lo del gallinero o deambulará como los partidos finales del torneo?? Eso lo que me importaba... aunque también hay que mirar del otro lado: podremos aprovechar que Quiroga no juega en su posición?. Esta bien.... demasiadas preguntas, es cierto.
Como siempre, por ese narcisismo que tienen, las hinchadas llegan tarde para hacerse notar. Muchas banderas y paraguas de un lado (les lloverá??.. jaja) y tremendo estruendo y trapo gigante del otro (el que me interesa, bah).
Boca insinúa los primeros minutos... luego sobreviene un leve dominio territorial de River. Algo con pelota parada de ellos... y un par de desbordes entre Dátolo y Mouche. River gana por derecha... Boca por izquierda. De repente el momento clave, Sebastian pierde la pelota y le da una patada para anaranjada... Baldassi la ve roja... no hay mucho que decir. Lo peor viene al minuto... gol para la hinchada que esta en el tablero electrónico. La gente de mi alrededor grita casi como si nada hubiera pasado... pero paso... la cosa se ve difícil uno menos y uno abajo en el marcador. Entonces, aparece eso intangible que hace la diferencia entre un multicampeon nacional (ultimo recientemente, je) y un verdadero campeón en todos lados… el plus que marca la diferencia. Centro-shot de Roncaglia en su primera excursión al área rival, botín zurdo de Dátolo y estalla la cabecera que da espalda a la Av. de las Olimpiadas… gooool de Boca. El partido parece once contra once…. o mejor dicho, doce contra once (Baldassi, trata de ayudar cuando puede a los millonarios). El primer tiempo se va en medio de un juego equilibrado, Boca bien parado en la zona central no se mete contra su arco.
Después de la tensión de esos minutos que parecían oscurecer la noche… el entretiempo sirve para liberar algo de nervios… seguir con los comentarios como “la próxima arrancamos el partido con nueve… para ver si terminamos empatando”. Por cansancio o para mantener el equilibro, Gracián deja su lugar a Chávez. Los 45 finales siguen mostrando a Boca firme y River… bueno.. River más de lo mismo, Gorosito intenta cambiar sus volantes externos… (ah!!.. jugó Buonanotte?!?!, salvo alguna patada y por la bronca cuando salió… el petiso ni la toco). Por su parte, Ischia hace un cambio lógico retira al agotado Mouche y pone al ligerito Noir. Chávez aporta en la recuperación y el manejo… Morel mete y mete… nadie pasa por izquierda y Dátolo…. bueno, Jesús hace de todo un poco: va al piso, la pisa, la lleva, tira el centro y casi la cabecea (ja, es una exageración, si?). Falta poco… Pochi le pone la pelota a Noir por el callejón que dejo el DT riverplatense libre con la salida de Villagra… y si… penaaaaaallll… gritamos todos… Baldassi, a regañadientes, lo cobra. Es cierto, era la noche para Dátolo…. Pero no voy a negar que recordé alguna definición por penales (no recuerdo contra quien) que pateó y no lo convirtió. Pero bueno… es su noche.. y así… es gooool, otra vez. Luego, 8 minutos para esperar el final… no para sufrir… el equipo de la banda… sigue sin alma, se arrastran 10 tipos (ya echaron al capitán)… no saben que hacer… y de contra desperdiciamos el tercero. Fiesta.. Fiesta.. de verano.
Tras los 3 minutos adicionales, otra vez… Boca gana.. otra vez el “silencio atroz” (jajaja).
Para colmo… la policía los hace irse primero…. así que arrecian los cantos de despedida y gastada azul y oro. Una hora casi para salir… una hora con orquesta de festejo. Mi compañero… bueno, traté casi de ignorarlo para no tentarme…. Pero no pude dejar de ver… como alguno le decía “que gallinas que son aquellos, no?” y el solo podía encoger los hombros para no debelar su identidad.
Las 2 horas para conseguir un taxi y llegar hasta el hotel, la lluvia, el hambre que termino a las 3:30 con una pizza de muzzarella, son solo detalles de una noche muy especial… o mejor dicho, otra noche de esas tantas que Boca nos regala a los hinchas xeneizes.
PD: perdón por la calidad de las imagenes y videos pero son tomadas con celular... y por la demora en publicar... pero recien regreso de mis vacaciones :)
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